sábado, 23 de octubre de 2010

Llegaste


No lo olvido, no puedo olvidarlo, sòlo lo dejarè pasar.


Es curioso cuando eso pasa en alguien para otro alguien. Un recuerdo, un nombre, a los años, al tiempo, no se olvida...se olvida, se vuelve a encontrar, se vuelve a ir. Luego, vuelve a volver. Solìas... bueno, nada, olvìdalo... què se puede decir? Nada, olvìdalo... reir? Sonreir? Decir : Vaya..? No, ya no. Lo dijiste, un miedo vencido esta noche, aunque no tan grande, es el lado positivo de todas esas palabras.

Una vez, estuve observando las estrellas de noche. Me preguntaba, inocentemente, si no serìan ventanas por las cuales alguien nos veìa del otro lado. Serìan luminosas porque era la luz del otro lado. Cuando las veìa fijamente, una de esas estrellas se hizo fugaz, se deslizò. Sentì mucha alegrìa, le pedì un deseo, creyendo a ojos cerrados en èl. Yo, sì creo en el destino. Nunca hubiese estado viendo las estrellas si no hubiese sido el momento. Desde mi razòn, equivocada o acertada, creo en el destino, me gusta lo que hago.


La A, se retroalimenta de sì misma y vuelva ser ella misma. Soy, Aaròn Alfonso Alva. La A, es una sola, se conoce, se presenta, se va, para luego venir nuevamente a ser màs A que nunca. Lo complejo del ser, es lo bonito de su existencia, nunca serìa màs bonito, si todo se resuelve para èl, nunca serìa mejor. Lo bonito està en que siempre se equivoque, porque lo volverà a intentar siempre, nunca acaba, sòlo mejora... La Psicologìa, es tu ayudante, pero el arte tu amante. Mis respuestas dejan de ser mìas al ser pronunciadas, son para los que las leen. Palabras ,palabras. Siendo las 04y39 am, no es lo ùltimo, ni lo decisivo, ni definitivo, siempre se podrà escribir y decir màs...

Dibùjalo.


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